Qué síntomas da el aceite de colza
Aceite de colza – deutsch
La colza pertenece a la familia de las coles y está estrechamente emparentada con la mostaza y el nabo, por lo que el aceite de colza se considera un aceite vegetal. De hecho, muchos aceites comercializados como “aceite vegetal” se componen principalmente de aceite de colza.
El aceite de colza industrial se utiliza en las industrias química y del automóvil, pero no es seguro para el consumo humano debido a su alto contenido en algo llamado “ácido erúcico”. Se trata de un ácido presente en altas concentraciones en los aceites derivados de la familia de la col, como el aceite de colza y mostaza.
El aceite de colza culinario es más conocido como aceite de canola. Se trata de una versión modificada genéticamente del aceite de colza que se ha criado para que contenga niveles más bajos de ácido erúcico, lo que lo hace seguro para el consumo (bueno, eso nos dicen convencionalmente).
¿Por qué se modificó genéticamente el aceite de colza? Se descubrió que la colza era uno de los cultivos oleaginosos más resistentes a las enfermedades y a la sequía, pero había un problema: su alto contenido natural de ácido erúcico era perjudicial tanto para los animales como para los seres humanos. Los estudios revelaron que era tóxico y lo relacionaron con toda una serie de consecuencias negativas para la salud.
Aceite de canola inflamatorio
La colza (Brassica napus subsp. napus), también conocida como colza o colza oleaginosa, es una planta con flores de color amarillo brillante de la familia Brassicaceae (familia de la mostaza o la col), que se cultiva principalmente por su semilla rica en aceite, que contiene naturalmente cantidades apreciables de ácido erúcico. El término “canola” designa un grupo de variedades de colza con un contenido muy bajo de ácido erúcico, especialmente apreciadas para la alimentación humana y animal. La colza es la tercera fuente mundial de aceite vegetal y la segunda de harina proteica[2][3].
Brassica napus alcanza los 100 cm (39 pulgadas) de altura con hojas inferiores glabras, carnosas, pinnatifides y glaucas[4][5][6] que están pecioladas mientras que las hojas superiores no tienen pecíolos[7]. B. napus se distingue de B. nigra por las hojas superiores que no sujetan el tallo, y de B. rapa por sus pétalos más pequeños que miden menos de 13 mm (1⁄2 pulgadas)[5].
Las flores de la colza son de color amarillo brillante y miden unos 17 mm (2⁄3 pulgadas) de diámetro[5]. Son radiales y constan de cuatro pétalos en forma de cruz, alternando con cuatro sépalos. Tienen una floración racemosa indeterminada que comienza en el brote más bajo y crece hacia arriba en los días siguientes. Las flores tienen dos estambres laterales con filamentos cortos y cuatro estambres medios con filamentos más largos cuyas anteras se separan del centro de la flor al florecer[8].
Canola
En general, se desconocen los agentes etiológicos responsables del desarrollo de las enfermedades autoinmunes. Está claro que el desarrollo de una comprensión de los agentes causantes será esencial para el desarrollo de estrategias para la terapia, si no la prevención, de estos problemas de salud. El sistema inmunitario es un objetivo de muchos tóxicos, incluidos los que se obtienen a través de la dieta. Un ejemplo importante del efecto inmunológico de las toxinas alimentarias es el síndrome del aceite tóxico (SST). La desnaturalización intencionada del aceite de colza con anilina dio lugar a la producción de anilidas de ácidos grasos. El consumo involuntario de este aceite adulterado en España provocó una intoxicación masiva cuyos efectos continúan en la actualidad. Entre otros signos clínicos, la mayoría de los pacientes con TOS presentaban características de hipersensibilidad de tipo 1. Un número menor de personas desarrollaron síntomas de enfermedades autoinmunes, incluida la esclerodermia. Estas observaciones ponen de relieve la probabilidad de que las sustancias químicas ambientales puedan ser una fuente importante de agentes etiológicos de enfermedades autoinmunes. En esta revisión, los autores ofrecen una visión general de algunas de las características más importantes del SST en relación con la inmunidad. Los autores también especulan sobre los mecanismos inmunopatológicos por los que progresó el TOS, haciendo hincapié en el estrés oxidativo como subproducto central de la lesión inducida por anilida.
Reacción del aceite de canola
El síndrome del aceite tóxico es una intoxicación rara, debida al consumo de un aceite de colza desnaturalizado con anilina al 2%, que se caracteriza por lesiones vasculares generalizadas que afectan a todos los órganos y vasos (incluidas venas y arterias) y cursan con mialgias incapacitantes graves, eosinofilia periférica marcada e infiltrados pulmonares.
España es el único país que ha notificado casos de esta enfermedad en la primavera de 1981 y los pacientes residían en catorce provincias del Centro y Noroeste. Se han registrado casi 20.000 personas, siendo las mujeres menores de 40 años las más frecuentemente y gravemente afectadas que los hombres.Descripción clínica
La causa del TOS es el consumo de aceite de colza comercial desnaturalizado con un 2% de anilina. Originalmente se vendía para uso industrial y durante la epidemia de 1981 se comercializó fraudulentamente para consumo humano. Todavía no está claro si los ésteres de ácidos grasos del 3-(N-fenilamino)-1, 2-propanediol (PAP) pueden inducir el TOS o si son simplemente marcadores de la toxicidad del aceite.Métodos de diagnóstico